Las incapacidades prolongadas representan un aspecto fundamental de la gestión de la salud en el trabajo, ya que se refieren a aquellas situaciones en las que el trabajador requiere un tiempo superior al habitual para su recuperación, producto de una enfermedad común, profesional o un accidente laboral. Estas incapacidades, además de impactar la productividad de la empresa, generan la necesidad de evaluaciones médicas periódicas, juntas de calificación de invalidez y seguimiento interdisciplinario, con el fin de determinar la capacidad residual de trabajo, la posibilidad de rehabilitación o la necesidad de reubicación laboral. La normatividad colombiana establece lineamientos claros para su manejo, involucrando tanto a las EPS, ARL y empleadores, como a las Juntas Regionales y Nacional de Calificación de Invalidez, garantizando así la protección del trabajador y la sostenibilidad del sistema.

Incapacidades prolongadas